En esta primera objeción el sabio teólogo comenta de la conclusión de Descartes "Pienso, luego existo", que es el mismo pensar o sino el espíritu el que llega a concebir las ideas de las cosas y tambiéwn la de algo superior y perfectísimo, que es lo divino. Ahora bien, como el ser pensante no llega a tener en claro la realidad objetiva de dichas ideas, el sabio teólogo dice que no se puede ser causa de esto, porque la causa debe ser algo perfecto y más perfecto que el hombre y lleno de conocimientos. Para eso el teólogo dice hace una cita de San Dionisio: "Hay una naturaleza que no posee el ser a la manera de las demás cosas, sino que abarca y contiene en sí, con toda simplicidad y sin limitacion alguna, cuanta esencia hay en el ser, y en quien toda cosa está encerrada como en su causa primera y universal".
Para el sabio teólogo la sola acción del pensar en las ideas no tiene un origen que le cause un movimiento, como diría Aristóteles que debe de existir un motor inmóvil para que surja el movimiento de alguna idea. Retomando lo del sabio teólogo, que solo pensariamos em algo que es pura denominación.
Las ideas que alguien pueda tener, para el teólogo no tienen causa superior e infinita, sino que se arguye en el ejemplo que da Descartes sobre el triángulo, cito: "Aunque acaso no existe en ningún lugar del mundo, fuera de mi pensamiento, una figura tal, y aunq2ue no haya existido nunca, no por ello deja de haber una naturaleza, o forma, o esencia determinada de dicha figura, que es inmutable y eterna". Dejando a entender que las ideas representan lo que mencionan. Por ejemplo: la carta es una carta, o un barco es un barco y no otra cosa. También deja a entender que por la imperfección del espíritu no se puede conocer todo lo que existe en el universo, sino que (el espíritu) concibe poco a poco y de manera imperfecta.
El teólogo se muestra de acuerdo con la regla que se establece en las meditaciones "que las cosas que concebimos con entera clarida y distinción son todas verdaderas". Pero aquí debemos de diferenciar lo que se concibe con el acto de lo que se quiere concebir, que es la voluntad. La vista ve lo que ve y el oido oye lo que oye. Entonces se puede afirmar que los sentidos cumplen una función natural pero que la voluntad sólo verá y oirá lo que desee; y es por este motivo que Descartes atribuye errores a la voluntad y al juicio. La impresión que tiene cada uno sobre el ser perfectísimo, viene impreso de manera natural, y como está en nosotros entonces se puede conocer lo infinito aunque no se lo pueda representar de manera clara. Cito: "Conocer que existe Dios en general y con cierta confución, a saber: en cuanto Dios es la beatitud del hombre, eso está impreso naturalmente en nosotros; pero eso no es sin más que Dios existe". Por lo tanto para el teólogo el conocer a Dios no es un acto racional, sino más bien algo genérico que se comprende confusamente.
Más adelante el teólogo comenta de que Descartes usa el argumento de Santo Tomas sobre la idea de Dios en la realidad; la cual explica que el pensar en él se encuentra en el entendimiento y que solo el concepto de la palabra "dios" estaría existiendo en la realidad. Se entiende que Dios siempre será concebido en el entendimiento y en la realidad cuando se está pensando en su concepto. El teólogo ahora comenta que la no existencia de algo que sea en la realidad (en acto como él lo llama) está relacionado también con la idea de existencia; por ejemplo: si se piensa en algo que existe o no, el solo hecho de pensar en ese algo implica también el de existencia.
Ahora, la respuesta que da Descartes a esta objeción es que de la idea del entendimiento, acalara que la idea de la cosa en el entendimiento no debe de tener alguna añaduria, como el compararse con el objeto de la realidad, como lo hace el teólogo. Si me dejo entender el teólogo habla acerca del objeto en la realidad y Descartes habla acerca de la idea del objeto en el entendimiento como una simple denominación extrínseca, cito: "Debe notarse que él se refiere a la cosa misma que está fuera del entendimiento, respecto de la cual es, ciertamente, denominación extrínseca el que está objetivamente en el entendimiento; pero yo hablo de la idea, que nunca está fuera del entendimiento, y respecto de la cual estar objetivamente no significa otra cosa que estar en el entendimiento tal y coo los objetos están habitualmente en él."
Acerca de la idea de Dios que concebimos nosotros, Descartes lo aclara que el tan solo la idea pensar en Dios se da una concepción de algo perfectísimo, entonces Descartes sigue diciendo que esta idea depende y procede de algo que en sí contenga la perfección y a lo mucho que puede copntener esa perfección es el Dios. Cito: "... puesto que tenemos en nosotros la idea de Dios, en la que se contiene todo perfección concebible, de ello se infiere con toda evidencia que esa idea depende y procede de alguna causa que contenga realmente en sí toda esa perfección, a saber: del Dios efectivamente existente".
De esto, Descartes deja entender que la concepción de la idea de Dios es algo inmutable que existe en la naturaleza, esencia o forma de dicha idea; y de ello dice se puede afirmar que Dios existe. Esto en relación de la idea que deja Descarte con la premisa mayor. Ahora bien lo que Descartes llama premisa menor, se entiende que está relacionado con lo material y que de aquí debemos de distinguir entre la existencia y esencia; puesto que no sabemos si la esencia es algo inmutable y verdadera no se puede afirmar sobre la existencia de Dios. Para eso hace dos diferencias entre la idea de Dios que es la existencia posible y la existencia necesaria. La primera está contenida en el concepto de toda idea que concebimos clara y distintamente y la segunda sólo está contenida en la idea de Dios.
Para el sabio teólogo la sola acción del pensar en las ideas no tiene un origen que le cause un movimiento, como diría Aristóteles que debe de existir un motor inmóvil para que surja el movimiento de alguna idea. Retomando lo del sabio teólogo, que solo pensariamos em algo que es pura denominación.
Las ideas que alguien pueda tener, para el teólogo no tienen causa superior e infinita, sino que se arguye en el ejemplo que da Descartes sobre el triángulo, cito: "Aunque acaso no existe en ningún lugar del mundo, fuera de mi pensamiento, una figura tal, y aunq2ue no haya existido nunca, no por ello deja de haber una naturaleza, o forma, o esencia determinada de dicha figura, que es inmutable y eterna". Dejando a entender que las ideas representan lo que mencionan. Por ejemplo: la carta es una carta, o un barco es un barco y no otra cosa. También deja a entender que por la imperfección del espíritu no se puede conocer todo lo que existe en el universo, sino que (el espíritu) concibe poco a poco y de manera imperfecta.
El teólogo se muestra de acuerdo con la regla que se establece en las meditaciones "que las cosas que concebimos con entera clarida y distinción son todas verdaderas". Pero aquí debemos de diferenciar lo que se concibe con el acto de lo que se quiere concebir, que es la voluntad. La vista ve lo que ve y el oido oye lo que oye. Entonces se puede afirmar que los sentidos cumplen una función natural pero que la voluntad sólo verá y oirá lo que desee; y es por este motivo que Descartes atribuye errores a la voluntad y al juicio. La impresión que tiene cada uno sobre el ser perfectísimo, viene impreso de manera natural, y como está en nosotros entonces se puede conocer lo infinito aunque no se lo pueda representar de manera clara. Cito: "Conocer que existe Dios en general y con cierta confución, a saber: en cuanto Dios es la beatitud del hombre, eso está impreso naturalmente en nosotros; pero eso no es sin más que Dios existe". Por lo tanto para el teólogo el conocer a Dios no es un acto racional, sino más bien algo genérico que se comprende confusamente.
Más adelante el teólogo comenta de que Descartes usa el argumento de Santo Tomas sobre la idea de Dios en la realidad; la cual explica que el pensar en él se encuentra en el entendimiento y que solo el concepto de la palabra "dios" estaría existiendo en la realidad. Se entiende que Dios siempre será concebido en el entendimiento y en la realidad cuando se está pensando en su concepto. El teólogo ahora comenta que la no existencia de algo que sea en la realidad (en acto como él lo llama) está relacionado también con la idea de existencia; por ejemplo: si se piensa en algo que existe o no, el solo hecho de pensar en ese algo implica también el de existencia.
Ahora, la respuesta que da Descartes a esta objeción es que de la idea del entendimiento, acalara que la idea de la cosa en el entendimiento no debe de tener alguna añaduria, como el compararse con el objeto de la realidad, como lo hace el teólogo. Si me dejo entender el teólogo habla acerca del objeto en la realidad y Descartes habla acerca de la idea del objeto en el entendimiento como una simple denominación extrínseca, cito: "Debe notarse que él se refiere a la cosa misma que está fuera del entendimiento, respecto de la cual es, ciertamente, denominación extrínseca el que está objetivamente en el entendimiento; pero yo hablo de la idea, que nunca está fuera del entendimiento, y respecto de la cual estar objetivamente no significa otra cosa que estar en el entendimiento tal y coo los objetos están habitualmente en él."
Acerca de la idea de Dios que concebimos nosotros, Descartes lo aclara que el tan solo la idea pensar en Dios se da una concepción de algo perfectísimo, entonces Descartes sigue diciendo que esta idea depende y procede de algo que en sí contenga la perfección y a lo mucho que puede copntener esa perfección es el Dios. Cito: "... puesto que tenemos en nosotros la idea de Dios, en la que se contiene todo perfección concebible, de ello se infiere con toda evidencia que esa idea depende y procede de alguna causa que contenga realmente en sí toda esa perfección, a saber: del Dios efectivamente existente".
De esto, Descartes deja entender que la concepción de la idea de Dios es algo inmutable que existe en la naturaleza, esencia o forma de dicha idea; y de ello dice se puede afirmar que Dios existe. Esto en relación de la idea que deja Descarte con la premisa mayor. Ahora bien lo que Descartes llama premisa menor, se entiende que está relacionado con lo material y que de aquí debemos de distinguir entre la existencia y esencia; puesto que no sabemos si la esencia es algo inmutable y verdadera no se puede afirmar sobre la existencia de Dios. Para eso hace dos diferencias entre la idea de Dios que es la existencia posible y la existencia necesaria. La primera está contenida en el concepto de toda idea que concebimos clara y distintamente y la segunda sólo está contenida en la idea de Dios.
